Una mirada ausente

Y a través de tus ojos miré al mundo y tuve esperanza. Una esperanza esquiva, que renacía desde lo más profundo de mi lúgubre y oscuro ser. Pero te fuiste con la esperanza... y no miré más al mundo porque no tenia ojos, y no creí que vinieras a buscarme porque solo tenía desesperanza. Así que intenté acabar conmigo, pero no me encontré por ninguna parte, porque recordé que mis ojos también se habían ido con vos.